Malasia es un país del sudeste asiático que ha experimentado un crecimiento económico significativo en las últimas décadas. Es conocido por su diversidad cultural, paisajes naturales impresionantes y un clima tropical. Además, Malasia ofrece una serie de ventajas fiscales y programas de residencia que pueden ser atractivos para expatriados, jubilados e inversores.
- Impuestos en Malasia:
Malasia tiene un sistema fiscal territorial, lo que significa que solo los ingresos generados dentro del país están sujetos a impuestos. Los ingresos obtenidos en el extranjero y remitidos a Malasia generalmente están exentos de impuestos.
- Impuesto sobre la renta de las personas físicas: Las tasas impositivas son progresivas, y varían entre el 0% y el 30% dependiendo del nivel de ingresos. Los residentes fiscales son aquellos que pasan más de 182 días al año en Malasia.
- Impuesto de sociedades: Las empresas locales están sujetas a una tasa impositiva del 24%, mientras que las pequeñas y medianas empresas (PYME) pueden beneficiarse de una tasa reducida del 17% para los primeros 500,000 MYR (aproximadamente 120,000 USD) de ingresos imponibles.
- Impuesto al valor agregado (IVA): Malasia no tiene un IVA tradicional. En su lugar, se aplica un impuesto sobre bienes y servicios (GST) del 0% desde el 1 de junio de 2018.
- Ventajas de la residencia fiscal en Malasia
- El programa «Malaysia My Second Home» (MM2H): Este programa de visado a largo plazo permite a los extranjeros vivir en Malasia durante 10 años, con posibilidad de renovación. Los requisitos incluyen un depósito fijo en un banco malasio, comprobante de ingresos mensuales y un seguro médico.
- Bajo costo de vida: Malasia ofrece un bajo costo de vida en comparación con otros países. El alojamiento, la alimentación y el transporte son más asequibles en general, lo que permite un estilo de vida más cómodo y relajado.
- Estabilidad política y económica: Malasia es un país políticamente estable y económicamente próspero. La economía del país está en constante crecimiento y se espera que siga siendo así en el futuro.
- Régimen fiscal favorable: Malasia ofrece un régimen fiscal favorable para los residentes fiscales. Existen exenciones y deducciones fiscales disponibles para los expatriados y se puede solicitar el estatus de «impuesto fijo» para ciertos tipos de ingresos.
- Diversidad cultural: Malasia es un país con una gran diversidad cultural, lo que permite una experiencia multicultural única. La comida, la música, la arquitectura y las tradiciones son una combinación única de influencias malayas, chinas, indias y europeas.
- Clima cálido y agradable: Malasia tiene un clima cálido y agradable todo el año, lo que permite disfrutar de la playa y las actividades al aire libre durante todo el año.
- Inconvenientes
- Barrera del idioma: Aunque el inglés es ampliamente hablado, puede haber dificultades de comunicación en áreas rurales o menos turísticas.
- Burocracia: La burocracia puede ser un desafío al tratar con instituciones gubernamentales y procesos de solicitud de visados.
- Pasos a seguir
a) Obtener una visa: antes de poder aplicar para la residencia fiscal, es necesario obtener una visa de larga duración en Malasia. Esto se puede hacer a través de una visa de trabajo, de estudio o de inversión.
b) Abrir una cuenta bancaria: una vez que se tenga la visa, es importante abrir una cuenta bancaria en Malasia. La mayoría de los bancos requieren que los extranjeros tengan una cuenta bancaria para poder solicitar la residencia fiscal.
c) Cumplir con los requisitos de residencia: para ser considerado residente fiscal en Malasia, se debe pasar más de 182 días al año en el país. También es importante tener una dirección física en Malasia.
d) Solicitar la residencia fiscal: una vez que se cumplan los requisitos anteriores, se puede solicitar la residencia fiscal en Malasia. Es necesario presentar una solicitud en el Departamento de Inmigración de Malasia y proporcionar la documentación necesaria, como pasaporte, certificado de empleo y estado de cuenta bancario.