Malta es un pequeño archipiélago en el Mediterráneo con un clima agradable, una rica historia y un sistema fiscal favorable que atrae a aquellos que buscan cambiar su residencia fiscal. En esta guía, exploraremos los impuestos, ventajas e inconvenientes de la residencia fiscal en Malta, así como los pasos a seguir para obtenerla.
I. Impuestos en Malta
- Impuesto sobre la renta de las personas físicas: El impuesto sobre la renta en Malta tiene una escala progresiva con tasas que varían entre el 15% y el 35%, dependiendo de los ingresos. Los residentes fiscales en Malta solo pagan impuestos sobre la renta generada o remitida a Malta.
- Impuesto sobre sociedades: Las empresas en Malta están sujetas a una tasa impositiva del 35% sobre sus beneficios. Sin embargo, hay un sistema de reembolsos que puede reducir efectivamente la carga fiscal a alrededor del 5%.
- Impuesto sobre el valor añadido (IVA): El IVA en Malta tiene una tasa estándar del 18%, con tasas reducidas del 7% y 5% para ciertos productos y servicios.
- Impuestos sobre el patrimonio y sucesiones: Malta no aplica impuestos sobre el patrimonio ni sobre sucesiones.
II. Ventajas de la residencia fiscal en Malta
- Sistema fiscal favorable: Malta ofrece un sistema fiscal atractivo para residentes e inversores, con impuestos solo sobre ingresos generados o remitidos a Malta, y un sistema de reembolsos para las empresas.
- Calidad de vida: Malta tiene un clima mediterráneo, hermosos paisajes y una rica historia que proporcionan una alta calidad de vida.
- Ubicación estratégica: Malta se encuentra en el centro del Mediterráneo, lo que facilita los viajes y conexiones entre Europa y África.
- Acuerdos de doble imposición: Malta ha firmado tratados de doble imposición con varios países, lo que evita que los residentes sean gravados dos veces por el mismo ingreso.
III. Inconvenientes de la residencia fiscal en Malta
- Tamaño y recursos limitados: Debido a su pequeño tamaño, Malta puede tener recursos limitados en áreas como la atención médica y la educación.
- Costo de vida: El costo de vida en Malta puede ser alto, especialmente en áreas populares y turísticas.
IV. Pasos para obtener la residencia fiscal en Malta
- Obtener una visa o permiso de residencia: Solicitar una visa o permiso de residencia apropiado, como la Visa de Residencia e Inversión de Malta (MRVP) o el Programa de Residencia Global (GRP).
- Establecer la residencia fiscal: Estar físicamente en Malta al menos 183 días al año o tener una vivienda en Malta con la intención de mantenerla como residencia habitual.
- Solicitar el Número de Identificación Fiscal (NIF): Acudir a la Oficina de Impuestos para solicitar el NIF, necesario para todas las transacciones fiscales en Malta.
- Declaración de impuestos: Presentar anualmente la declaración de impuestos en Malta, incluyendo los ingresos generados o remitidos a Malta.
Conclusión
Ser residente fiscal en Malta puede ser una buena idea por varias razones:
- Sistema fiscal atractivo: Malta es conocida por su sistema fiscal favorable para individuos y empresas. El país utiliza un sistema de imputación, lo que significa que los accionistas de una empresa maltesa pueden recibir un reembolso de impuestos sobre los dividendos que reciben. Además, los residentes fiscales solo pagan impuestos sobre la renta generada o remitida a Malta, lo que puede ser beneficioso para aquellos con ingresos internacionales.
- Bajas tasas de impuestos corporativos: Aunque la tasa nominal del impuesto de sociedades en Malta es del 35%, las empresas pueden beneficiarse de una serie de deducciones y reembolsos fiscales que reducen efectivamente la tasa impositiva a niveles mucho más bajos.
- Acuerdos de doble imposición: Malta ha firmado tratados de doble imposición con varios países, lo que evita que los residentes sean gravados dos veces por el mismo ingreso. Esto puede ser beneficioso para los expatriados y aquellos con ingresos internacionales.
- Ubicación geográfica: Malta está ubicada en el centro del Mediterráneo, lo que facilita el acceso y viaje a otros países europeos y del norte de África. Además, el país cuenta con una red de transporte bien desarrollada.
- Calidad de vida: Malta ofrece una alta calidad de vida, con un clima agradable, hermosos paisajes, una rica historia y cultura, y una amplia oferta de actividades de ocio y deportivas.
- Estabilidad política y económica: Malta es un país políticamente estable y con una economía en crecimiento, lo que puede ser atractivo para inversiones y planificación financiera a largo plazo.