Portugal se ha convertido en un destino atractivo para aquellos que buscan cambiar su residencia fiscal debido a sus ventajas fiscales y calidad de vida. En esta guía, exploraremos las ventajas e inconvenientes de la residencia fiscal en Portugal, así como los pasos a seguir para obtenerla.
I. Impuestos en Portugal
- Impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRS): El IRS en Portugal tiene una escala progresiva con tasas que varían entre el 14,5% y el 48%, dependiendo de los ingresos. Sin embargo, los residentes no habituales pueden beneficiarse de un régimen fiscal especial durante los primeros 10 años.
- Impuesto sobre sociedades: Las empresas en Portugal están sujetas a una tasa impositiva del 21% sobre sus beneficios.
- Impuesto sobre el valor añadido (IVA): El IVA en Portugal tiene una tasa estándar del 23%, con tasas reducidas del 13% y 6% para ciertos productos y servicios.
- Impuestos sobre el patrimonio y sucesiones: Portugal no aplica impuestos sobre el patrimonio, pero sí tiene impuestos sobre sucesiones y donaciones, aunque pueden ser exentos o reducidos en ciertos casos.
II. Ventajas de la residencia fiscal en Portugal
- Régimen fiscal para residentes no habituales (RNH): Portugal ofrece un régimen fiscal favorable para los nuevos residentes fiscales durante los primeros 10 años. Los residentes no habituales pueden beneficiarse de una tasa impositiva reducida del 20% sobre sus ingresos laborales en Portugal y estar exentos de impuestos sobre sus ingresos extranjeros, siempre que cumplan ciertos requisitos.
- Acuerdos de doble imposición: Portugal ha firmado tratados de doble imposición con varios países, lo que evita que los residentes sean gravados dos veces por el mismo ingreso.
- Exención del impuesto sobre sucesiones y donaciones: Portugal no aplica impuestos sobre sucesiones y donaciones a los residentes fiscales, siempre que los beneficiarios sean también residentes fiscales en Portugal.
- Calidad de vida: Portugal es conocido por su clima agradable, paisajes impresionantes, rica cultura y bajo coste de vida en comparación con otros países europeos.
III. Inconvenientes de la residencia fiscal en Portugal
- Impuestos indirectos: A pesar de las ventajas fiscales, especialmente para los extranjeros, Portugal tiene impuestos indirectos como el IVA, que puede ser relativamente alto y reducir tu poder adquisitivo en el país luso.
- Burocracia: El proceso de solicitud y las interacciones con las autoridades fiscales portuguesas pueden ser complicados y lentos en algunos casos, pero con paciencia y aportando toda la documentación requerida, no suelen haber problemas.
IV. Pasos para obtener la residencia fiscal en Portugal
- Determinar la elegibilidad: Asegurarse de cumplir los requisitos para el régimen fiscal de RNH y verificar si es aplicable a su situación.
- Obtener una residencia legal en Portugal: Solicitar un visado o permiso de residencia, como el visado D7 (para jubilados y personas con ingresos pasivos) o el visado de residencia para inversores (ARI, también conocido como Golden Visa).
- Empadronamiento: Registrarse en la junta de freguesia local como residente y obtener el Certificado de Residencia.
- Solicitar el Número de Identificación Fiscal (NIF): Acudir a la Autoridade Tributária e Aduaneira para solicitar el NIF, necesario para todas las transacciones fiscales en Portugal.
- Cumplir con los requisitos de residencia: Estar físicamente en Portugal al menos 183 días al año o tener una vivienda en Portugal con la intención de mantenerla como residencia habitual.
- Solicitar el estatus de residente no habitual: Presentar la solicitud al Ministerio de Finanzas dentro de los primeros seis meses del año siguiente al establecimiento de la residencia en Portugal.
- Declaración de impuestos: Presentar anualmente la declaración de impuestos en Portugal, incluso si está exento de impuestos sobre ciertos ingresos.
Conclusión
Ser residente fiscal en Portugal puede ser una buena idea por varias razones:
- Régimen fiscal para residentes no habituales (RNH): Portugal ofrece un régimen fiscal especial para residentes no habituales que se mudan al país. Este régimen permite a los beneficiarios disfrutar de una exención de impuestos sobre la renta extranjera y una tasa reducida del 20% sobre ciertos ingresos generados en Portugal durante un período de 10 años.
- Acuerdos de doble imposición: Portugal tiene tratados de doble imposición con varios países, lo que evita que los residentes sean gravados dos veces por el mismo ingreso. Esto puede ser beneficioso para los expatriados y aquellos con ingresos internacionales.
- Calidad de vida: Portugal es conocido por su alta calidad de vida, con un clima agradable, hermosos paisajes y una rica cultura. El país también cuenta con una buena atención médica, infraestructuras y una amplia oferta de actividades de ocio y deportivas.
- Costo de vida: El costo de vida en Portugal es generalmente más bajo que en otros países europeos, lo que puede ser atractivo para aquellos que buscan reducir sus gastos o disfrutar de un estilo de vida más relajado.
- Seguridad y estabilidad: Portugal es un país seguro y políticamente estable, lo que puede ser atractivo para aquellos que buscan un entorno tranquilo y seguro para vivir y trabajar.
- Ubicación geográfica: Portugal está ubicado en el suroeste de Europa, lo que facilita el acceso y viaje a otros países europeos y a África. Además, Portugal cuenta con una red de transporte público bien desarrollada.