En Singapur, el impuesto sobre la renta se aplica sobre la base del territorio, lo que significa que solo se gravan los ingresos generados dentro del país. Las tasas impositivas varían según el nivel de ingresos y se encuentran entre el 0% y el 22%. También hay una tasa impositiva del 17% sobre el impuesto a las ganancias de capital, pero las ganancias de capital a largo plazo están exentas de impuestos.
Además, Singapur ofrece un sistema de impuestos corporativos muy competitivo, con una tasa impositiva del 17% para las empresas. También existen una serie de incentivos fiscales para empresas y emprendedores, como el Programa de Incentivos Económicos (EIP), que ofrece una exención de impuestos por un período de hasta 15 años para empresas que cumplen ciertos criterios.
En cuanto al IVA, Singapur aplica un impuesto del 7% a la mayoría de los bienes y servicios, pero hay exenciones y reducciones para ciertos artículos y actividades.
Es importante tener en cuenta que Singapur tiene acuerdos de doble imposición con muchos países, lo que significa que los ingresos que ya han sido gravados en el extranjero pueden estar exentos de impuestos en Singapur. Además, Singapur no aplica impuestos sobre la herencia, donaciones o patrimonio neto.
Ventajas de ser residente fiscal en Singapur
- Bajos impuestos: Singapur tiene un sistema tributario pro-empresarial, con tasas de impuestos sobre la renta personal y corporativa relativamente bajas en comparación con otros países desarrollados.
- Excelente ubicación geográfica: Singapur es un centro estratégico para los negocios en Asia, con conexiones aéreas y marítimas a la mayoría de los destinos importantes en la región.
- Economía próspera: Singapur tiene una economía fuerte y en constante crecimiento, con una gran cantidad de oportunidades de negocio para empresas y emprendedores.
- Estabilidad política y social: Singapur es un país estable y seguro, con una baja tasa de criminalidad y un gobierno eficiente y transparente.
- Infraestructura de clase mundial: Singapur cuenta con una infraestructura moderna y de alta calidad en términos de transporte, comunicaciones, tecnología y servicios públicos.
- Política pro-innovación: Singapur tiene una política pro-innovación que promueve la inversión en tecnologías y negocios innovadores, lo que hace que sea un lugar atractivo para emprendedores y empresas de alta tecnología.
- Sistema bancario confiable: Singapur cuenta con un sistema bancario confiable y estable, lo que la convierte en un centro financiero importante para Asia y el mundo.
- Diversidad cultural: Singapur es un crisol de culturas y cuenta con una comunidad empresarial internacional diversa, lo que ofrece una amplia gama de oportunidades de networking y colaboración.
Visados para vivir en Singapur
Para convertirse en residente fiscal en Singapur, los extranjeros deben solicitar un permiso de trabajo o un visado de inversión, que se otorga a los inversores que desean establecer negocios en el país. Los solicitantes también deben cumplir con ciertos requisitos, como la posesión de habilidades especiales o una oferta de trabajo en el país. Una vez que se ha obtenido el permiso de trabajo o el visado de inversión, el siguiente paso es solicitar la residencia permanente en Singapur.
Inconvenientes de ser residente fiscal en Singapur
- Costo de vida elevado: Singapur es conocido por ser uno de los países más caros del mundo, lo que puede ser un inconveniente para algunos.
- Restricciones de propiedad: como extranjero, hay restricciones en la propiedad inmobiliaria y en ciertos sectores empresariales.
Pasos a seguir para trasladar tu residencia a Singapur
- Obtener un permiso de trabajo o visado de inversión: El primer paso para establecer la residencia fiscal en Singapur es obtener un permiso de trabajo o un visado de inversión. Esto se puede hacer a través de la Inmigración y Checkpoints Authority (ICA) o mediante la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) si se desea establecer una empresa.
- Abrir una cuenta bancaria: Para poder solicitar la residencia fiscal, se debe abrir una cuenta bancaria en Singapur. Se recomienda que sea una cuenta bancaria en una institución financiera de renombre.
- Obtener una dirección local: Es necesario tener una dirección local en Singapur para registrarse como residente fiscal. Esta dirección puede ser la dirección de la empresa o la dirección residencial.
- Solicitar la residencia fiscal: Una vez que se hayan completado los pasos anteriores, se debe presentar una solicitud de residencia fiscal en Singapur. Esta solicitud se realiza a través de la Autoridad Tributaria de Singapur (IRAS). Se requerirá documentación como prueba de empleo o de propiedad empresarial.
- Cumplir con los requisitos fiscales: Una vez que se haya obtenido la residencia fiscal en Singapur, se deben cumplir con los requisitos fiscales establecidos por el gobierno. Esto incluye la presentación de declaraciones de impuestos y el pago de los impuestos correspondientes.