Traslada tu residencia donde te traten mejor
Si crees que los impuestos en tu país son injustos, estás perdiendo poder adquisitivo y quieres tener más libertad. Ha llegado la hora de cambiar de residencia fiscal.
Guías fiscales por países
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Requisitos para ser residente fiscal
Los requisitos para ser considerado residente fiscal de un país varían según las leyes y reglamentaciones específicas de cada jurisdicción. A continuación se presentan algunos criterios comunes que suelen utilizarse para determinar la residencia fiscal:
Presencia física: En muchos países, la cantidad de días que una persona pasa en el territorio determina su residencia fiscal. Por ejemplo, si alguien está presente en un país durante más de 183 días en un año calendario, puede ser considerado residente fiscal.
Domicilio permanente: Si una persona tiene una vivienda en un país que está disponible para su uso de forma continuada, esto puede ser un indicativo de residencia fiscal.
Vínculos personales y económicos: Los vínculos familiares, sociales, profesionales y económicos de una persona con un país también pueden influir en su condición de residente fiscal. Esto incluye factores como el lugar donde reside su familia, el país en el que trabaja o el lugar donde tiene sus intereses económicos.
Centro de intereses vitales: Si el centro de intereses vitales de una persona (es decir, sus relaciones familiares y económicas más estrechas) se encuentra en un país, es probable que sea considerado residente fiscal de ese país.
Nacionalidad: En algunos casos, la nacionalidad de una persona puede determinar su residencia fiscal como en Estados Unidos, aunque esto no es un criterio universalmente aplicado.